Cuando trabajas por cuenta ajena, es posible que en algún momento necesites ausentarte temporalmente de tu puesto de trabajo por motivos personales, familiares o de fuerza mayor. En estos casos, los permisos no retribuidos contemplados en el Estatuto de los Trabajadores son una herramienta legal muy útil para equilibrar tus necesidades personales con tus responsabilidades laborales.
Con la entrada en vigor de algunas modificaciones legales en 2025, es especialmente importante estar al día sobre cómo se regulan actualmente los permisos no retribuidos, qué tipos existen y qué derechos y obligaciones implican tanto para ti como para tu empresa.
En este artículo vamos a explicarte en detalle no sólo qué es un permiso no retribuido y cómo solicitarlo paso a paso, sino también cómo ha evolucionado su regulación en 2025, qué consecuencias tiene para tu cotización a la Seguridad Social y en qué casos puede ser denegado.Si además te interesa profundizar en otros aspectos relacionados con la gestión del talento, la selección de personal para empresas o la normativa laboral vigente, te invitamos a visitar nuestro blog, donde encontrarás más artículos pensados para ayudarte a tomar decisiones.
Contenido
¿Qué es un permiso no retribuido?
Un permiso no retribuido es una autorización que te concede tu empresa para ausentarte del trabajo durante un tiempo determinado sin recibir salario. Aunque implica una suspensión de tu contrato laboral respecto a la obligación de trabajar y de ser remunerado, sigues manteniendo tu vínculo con la empresa.
El Estatuto de los Trabajadores no regula de manera exhaustiva todos los aspectos de los permisos no retribuidos, ya que en muchos casos su concesión depende de la negociación entre la empresa y el trabajador o de lo establecido en el convenio colectivo de aplicación. No obstante, sí sienta algunas bases importantes, especialmente en lo relacionado con los permisos vinculados al cuidado de familiares o hijos, donde existe una mayor protección legal.
Las principales características de los permisos no retribuidos, según el Estatuto de los Trabajadores (ET), son:
- Voluntariedad: Eres tú quien solicita el permiso.
- Temporalidad: Tienen una duración limitada y pactada.
- No remuneración: No tienes derecho al salario durante el periodo de permiso.
- Reincorporación garantizada: Una vez finalizado el permiso, puedes volver a tu puesto de trabajo en las condiciones acordadas.
Un punto importante es que el permiso no retribuido debe pactarse entre trabajador y empresa, dado que, salvo excepciones, el Estatuto no obliga al empresario a concederlo si no existe causa justificada.
Marco legal de los permisos no retribuidos en 2025
La normativa sobre permisos no retribuidos en España se articula principalmente a través del Estatuto de los Trabajadores, que establece los principios generales para su concesión y ejercicio.
Aunque tradicionalmente ha existido un marco básico, en 2025 se han introducido algunas actualizaciones relevantes que buscan mejorar la conciliación de la vida personal y laboral, en cumplimiento de las directrices europeas en esta materia. En concreto, se han actualizado ciertos aspectos normativos que afectan directamente a los permisos:
- Plazos de solicitud: Se exige un preaviso mínimo de 15 días salvo convenio colectivo que indique lo contrario.
- Motivaciones reconocidas: Se refuerza la protección de permisos vinculados a cuidados familiares y conciliación, alineándose con la Directiva (UE) 2019/1158 sobre la conciliación de la vida familiar y laboral de los progenitores y cuidadores.
- Protección del puesto de trabajo: Se especifica que para permisos inferiores a cuatro meses, el puesto de trabajo debe ser reservado de forma efectiva.
Estas modificaciones buscan adaptarse a las normativas europeas y promover entornos laborales más flexibles y humanos. Según datos de Eurofound (2023), un 27% de los trabajadores en la UE ha solicitado algún tipo de permiso relacionado con cuidados familiares en los últimos dos años, reflejando una tendencia creciente que también impulsa los cambios legislativos.
Tipos de permisos no retribuidos
No todos los permisos no retribuidos son iguales. Dependiendo de la situación, puedes optar a diferentes modalidades:
● Permiso no retribuido por cuidado de familiares: Se solicita para atender a familiares hasta segundo grado de consanguinidad o afinidad que, por razones de edad, accidente o enfermedad, no puedan valerse por sí mismos. La duración y condiciones varían según el convenio colectivo, pero suele estar en torno a un máximo de dos años.
● Permiso no retribuido por cuidado de hijos: En este caso, puedes solicitar la excedencia para el cuidado de hijos, tanto biológicos como adoptados, normalmente hasta que el menor cumple los tres años. Según el Eurostat, en 2022 cerca del 6% de los trabajadores europeos optaron por excedencias para cuidado de hijos.
● Permiso no retribuido por intereses personales: Aunque menos regulado, algunos convenios colectivos permiten solicitar tiempo libre por razones personales, siempre pactándolo previamente.
Recuerda que los detalles específicos pueden variar según el sector o el convenio de tu empresa.
Proceso para solicitar un permiso no retribuido
Solicitar un permiso no retribuido requiere seguir un proceso formal que garantice tanto tus derechos como los de la empresa.
Aunque puede variar ligeramente en función del convenio colectivo aplicable o de las políticas internas de cada empresa, existen una serie de pasos comunes que deberías conocer y seguir para aumentar las posibilidades de que tu solicitud sea aceptada y gestionada correctamente:
- Consulta el convenio colectivo: Antes de pedirlo, revisa tu convenio o acuerda directamente con Recursos Humanos las condiciones aplicables.
- Redacta una solicitud por escrito: En la carta debes indicar tus datos personales, los motivos del permiso, la duración estimada y la fecha de inicio y fin.
- Presenta la solicitud con antelación: En general, el preaviso debe ser de al menos 15 días, aunque puede variar.
- Negociación y acuerdo: La empresa puede solicitar más información y negociar las condiciones (por ejemplo, duración exacta).
- Firma del acuerdo: Lo ideal es que el acuerdo quede firmado por ambas partes para mayor seguridad jurídica.
Ejemplo de solicitud:
“Por la presente, solicito un permiso no retribuido desde el 1 de julio de 2025 hasta el 30 de septiembre de 2025 por motivos de cuidado de un familiar en situación de dependencia.”
Una buena preparación de la solicitud y comunicación clara con tu empresa facilitarán el proceso.
¿Se puede denegar un permiso no retribuido?
Aunque el permiso no retribuido es una herramienta valiosa para conciliar la vida personal y laboral, debes saber que su concesión no siempre es automática. A diferencia de otros permisos regulados expresamente en la ley (como el permiso por nacimiento de hijo o el permiso para exámenes oficiales), el permiso no retribuido, salvo en situaciones específicas protegidas, depende de la aceptación de la empresa.
En consecuencia, la empresa puede denegar tu solicitud en determinados supuestos. Eso sí, debe hacerlo de manera justificada y razonada, evitando decisiones arbitrarias o discriminatorias que pudieran ser impugnadas judicialmente.
Las principales razones para denegar una solicitud son:
- Incompatibilidad operativa: Si la ausencia afecta gravemente al funcionamiento del departamento o de la empresa.
- Falta de justificación: Si no se acredita adecuadamente la causa del permiso solicitado.
- Duraciones excesivas: Si el tiempo solicitado supera los límites razonables del convenio colectivo.
En todo caso, la empresa debe justificar de manera objetiva la denegación para evitar conflictos laborales. De hecho, el Tribunal Supremo de España ha establecido en varias sentencias (como la STS 3615/2022) que la negativa debe ser proporcionada y razonada.
Impacto de los permisos no retribuidos en la cotización y beneficios
Tomar un permiso no retribuido implica efectos directos sobre tus cotizaciones a la Seguridad Social y tus beneficios laborales:
- Cotización: Durante el permiso, la empresa no cotiza por ti, salvo en casos especiales como excedencias por cuidado de hijos o familiares, donde sí existe obligación de cotizar (según el artículo 237 de la Ley General de la Seguridad Social).
- Antigüedad: El tiempo de permiso no retribuido no computa a efectos de antigüedad en la empresa, a menos que el convenio indique lo contrario.
- Vacaciones: El periodo de permiso no genera derecho a vacaciones.
- Pagas extraordinarias: No percibes pagas durante la ausencia, ni tampoco partes proporcionales.
Por ejemplo, si solicitas un permiso de tres meses para cuidado de un familiar, esos meses no se tendrán en cuenta para el cálculo de tu antigüedad ni para el cómputo de las vacaciones del año en curso, salvo acuerdo expreso con la empresa.
Según datos de la Comisión Europea (2023), los permisos de cuidados familiares protegidos por cotización aumentan la probabilidad de reincorporación exitosa al mercado laboral en un 18% en comparación con permisos sin protección.
Conclusión
Los permisos no retribuidos son una herramienta valiosa para afrontar situaciones personales que requieren de tu presencia, pero es fundamental entender su regulación y efectos. En 2025, con las recientes modificaciones del Estatuto de los Trabajadores, los permisos ganan en protección, especialmente en lo relacionado con la conciliación familiar.
Antes de solicitar uno, asegúrate de cumplir los requisitos legales, comunicarte de manera efectiva con tu empresa y valorar cómo afectará a tu cotización y beneficios laborales. Y recuerda: una planificación adecuada te permitirá hacer uso de estos permisos de manera segura y sin afectar de forma negativa tu trayectoria profesional.
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